Ahora que

Ahora que no siento los latidos
cómo justifico este corazón. 
Ahora que las fotos vuelan por el cielo
cómo olvido tu recuerdo de mis miedos.
Ahora que caminas lejos de esta habitación 
cómo no esperar con la puerta abierta.

Ahora que te quiero como querías
cómo te convenzo con una mejor razón.
Ahora que me quema el frío 
dónde meto las ironías. 
Ahora que mi amor fluye como un río
dónde busco quien esto entienda.

Ahora que crees que todo es un pretexto;
ahora que no crees en las personas; 
ahora que me abandonas con un "lo siento"; 
ahora que recuerdas los errores; 
ahora que avivan tus temores;
ahora que ya no miento; 
ahora tienes otros amores.
Ahora que te crees algo; 
ahora que te elevaron el ego;
ahora dime qué hago; 

Ahora que no te entretengo
cómo distraigo mi condena. 
Ahora que aprendiste a engañar a tu memoria,
que aparezco y desaparezco de ella cual historia,
dónde escondo la coherencia.
Ahora que no me olvido del hambre de un niño
como de tu silueta enredándose entre mis manos.
Dónde recurro para que mis motivos no sean vanos
Ahora que mi espalda vuelve a ser sensible 
cómo burlar la retentiva de mi piel. 

Ahora que estás sola, quizás;
ahora que no te llena tu rededor;
ahora que la distancia es grande; 
ahora que vivir te duele; 
ahora que tu piel no se agita; 
ahora que sospechas un cuerpo igual;
ahora no siento absurdo el que no estés aquí;
ahora las manos miran para otro lado; 
ahora se repite la forzosa situación
como es quererte cuando no quieres 
y olvidarme de ti en la peor ocasión.

Solo

Una canción me acompaña en esta mañana.
Arrancó la soledad impregnada en la ventana.
Una pared de ladrillos me impide ver tras de ella una montaña.
Repetí la canción dilatando la vuelta a la añoranza.

Será que la aurora se eternizará
y así  no descubra esta noche oscura.
Mientras una sirena interrumpe mi desamparo
reconozco que el abandono no se cura.

Recuerdo un beso inseguro y desatinado.
Entiendo que estoy solo porque así lo quise,
que compañía no es lo contrario de soledad
y que mis labios ya saben de qué hablar

Aquí Estoy

Y aquí estoy, pensando cómo besarte 
con lo fácil que fue hace tan pocas horas.
Las palabras vienen y van, no logro ordenarlas.
Las ideas están, solo falta vestirlas
para que salgan al mundo como obras de arte.

Quizás al gustarte tanto decidas por decidirte 
y averigües qué quieres de esta vida.
Te pasa lo mismo tal vez que a mi mente,
que procura no equivocarse al decirte: ...

No me muero si te vas, pero muero porque estés aquí.
Los labios que dejaste no sienten frío esperándote. 
No tienen prisa las manos que abrazaron cada espacio de ti.
No quiero hacer cábalas del destino de tus pensamientos. 
Yo no quiero reprochar ni saber por qué lo hiciste.

Te espero aunque el gris invada el cielo, 
con las mismas ganas de derretir el hielo, 
con una flor en la mano, con una fantasía,
con las velas casi enteras, con la primavera,
con café caliente o un vino en la nevera, 
con el calor intacto, con los sueños aun por luchar,
con muchos amaneceres por despertar,
con el espacio que dejaste vacío, 
con el deseo de hacer a tu hermano tío,
con los libros haciendo fila para tus ojos,
con viajes con el camino por andar, 
con más canciones, con esperanza, 
con la verdad por vivir con arrugas,
con la mesa lista para cenar.

Desnudo

Huí de tantos lados, unos, menos mal, y otros, equivocados quizás.
Pero ahora me encuentro en el lugar donde al final todos acabamos,
pidiendo a las estrellas que se despidan de ti por mí,
buscando perdón en los abrazos que no nos dimos.

Quisiera que no vieras en lo que no me convertí
en detrimento de tu soledad, curada, espero.
Quiero que entiendas, aunque no lo compartas,
que un día te quise pero ya no puedo.

Desde el árbol plantado a la orilla del mundo
observo mis pasos, no con rabia, sí con la esperanza
de que la deuda de mis dudas esté saldada
para caminar por fin desnudo.

Desconozco

Tomando la parte mas pequeña que un día nos unió
repaso el sistema local de mis sentimientos.
Parece que escucho tu llanto en el vacío,
el ruido parece ser del hijo del vecino.
El desorden del pasado y presente se vaticina 
no sale nada coherente de mi mente sin tino .
Aunque el llanto cesó con el seno de la vecina
sigo esperando que llegues con el vino.

Pero tus oídos están secos
o mi lógica elemental ha tomado veneno.
Las estrellas se han cansado de los ecos,
como mis manos de las noches frías.
Vuelve si adivinas lo que te digo
o la desidia se apoderará de mis venas
como las penas de mis últimas letras,
que piden esencia de ti cual mendigo.

Sueños rotos

Cual hojas que se desprenden de su vida
en otoño tú renunciaste a los sueños
que solo intuías, pero que no eran nuevos.
Por culpa del viento, de las heridas,
cuando estas tenían que ser la fuente
tú las condenaste a ser culpables.

Después lo que queda es arrepentirte,
echarme más culpas encima,
mirar como salvavidas a los demás,
creerte tus engaños disfrazados de lógica,
cuando lo único que haces es mentirte.
Tú le llamas futuro y yo vacío.

Algunas noches entre sueños
reconocerás la farsa, pero será tarde.
Te joderás tanto que creerás que lo mereces
y formarás parte de los sueños rotos
que antes eran la esencia de la risa,
enemigos de la rutina y freno de la prisa.

Cual trivial día que se pierde en el ocaso
desaparecen las ganas, pero no mueres.
Te acostumbras a vivir los días fúnebres,
y ¿eso no es lo más parecido a la muerte, acaso?
Muérete de una vez y mátame después
si hoy caminamos con los mismos pies.

Qué esperabas

Esperando que alegraras mi corazón
tal lluvia desprende la aridez del suelo seco
alimentaba básicamente tu ego
ya que aprendiste a medir mis palabras
y los hechos sacrificarlos al olvido.

Qué esperabas encontrar de la vida en mí
si viniste sin saber que ya nos conocíamos antes.
No te culpo que vivas fuera del presente,
desconoces tanto de ti...
que mis anhelos de ti  viven en la cuerda floja constantemente.

Contradictorio

He comprendido que la ironía es parte de la vida
como lo son los amaneceres olvidados por la sucia rutina,
o como tu olor en mis recuerdos,
que siento que estás en la esquina
y yo sobrando en el mundo de los cuerdos.

Conozco el espacio entre tus poros
sin embargo, estás más lejos de lo que puedo imaginar.
Tal vez estés en este momento en brazos de otro...
¡y yo sembrando flores para regalártelas!
¡Cuán contradictorias son mis ganas de estar en paz!

La noche serena y fría contrasta con la fiebre de mis pensamientos
que trasnochan recordando la suavidad de tu piel,
pero despierto con un tibio sabor a hiel
sabiendo que tu cama está en otro lugar en estos momentos.

Interesante sería encontrar respuestas a tu ausencia
disfrazadas de mil preguntas incómodas,
pero no es lo más importante por ahora,
ni demostrar decencia.
Y sí, por contradictorio que sea, quererte hasta que quieras.

Amor imperfecto

Que te besé cuando no era el momento
me lo reprocharon tus ojos;
que nos empezamos a querer cuando no era tiempo,
que te deseo antes de firmar,
no lo puedo cambiar,
decir lo contrario sería mentir.

Que encontraste las dudas
enfrente del precipicio,
mejor así que abajo llorarlas;
que besar tu lengua es mi vicio;
no comprenden tus labios
ni los ojos de los demás.

Que en otro momento sería mejor,
para algo que existe hoy.
No todo llega cuando queremos,
como la angustia de mis latidos
por el origen de estos versos.

Quiero un amor que no sea el que esperas
ni el que yo merezco,
ni el que te inculcaron tus padres
ni el que sufriste con tu novio.
Quiero un amor imperfecto
sincero, eterno , verdadero.

Te invito

¿De dónde eres? Nunca es tarde para conocerte,
solo que no preguntes a dónde voy
que tendría que confesarte
que no esperaba encontrarte.

Prometerte es igual a un acto de prepotencia;
nunca podría quererte tanto como hoy.
Cambiarte... mejor cambiemos de tema.
Extrañarte el día de hoy es mi lema.

Que no quieres nada conmigo...
piénsalo, quizás sea yo la suma de todo tus tropiezos.
Veinte ranas para quedarte al fin con el definitivo.
¡Tal vez que hasta para agradecerme tengas que darme un beso!

No huyas de donde no te han tratado mal
imaginando que el pasado o el futuro te tratarán mejor.
La vida es el tiempo que inviertes pensándolo,
no derroches oportunidades, amor.

Mi única virtud es mirarte a los ojos,
mentirte solo cuando te des cuenta.
No quiero reclamarte nada
ni pedir lo que no me quieras dar.

Te invito a un vino al otro lado del mundo,
a sentir la vida en un segundo,
a desgastar los labios
hasta quedarnos mudos.

Horizonte

Te encontré entre un horizonte y un mar oscuro.
Tus labios sorprendidos asintieron mi atrevimiento,
los corazones corrieron más deprisa que los pies.
Quiero conocerte antes de que vueles a Saturno
y saber qué hay detrás de tus ojos taciturnos.

Sé que estás cansada de tanto,
que tus ojos no producen llanto sincero.
La necesidad biológica te obliga,
quieres algo nuevo para tu vida,
que no se repitan las heridas.

Mudar de uno mismo es volar
pero siempre con la misma pista de aterrizaje.
Si quieres te llevo el equipaje
o te espero en ninguna parte.

La Luna está completa como esta letra.
La vida es eterna hasta que quieras.
Si quieres toma las maletas
o ven que esta noche es demasiado larga.

El amor

El amor no es lo que andabas buscando

ni lo que te contaron las novelas ni chicos con velas.

El amor no te lo dicen, no te lo escriben, no lo sueñas.

El amor no tiene forma ni normas; no es lo que estoy pensado.

Un beso apasionado ayuda como ayudan unas flores.

La seguridad material ayuda a no pensar en algunos problemas,

como una cortina de humo, como zumo de naranja para la gripe.

Llegar primero ayuda a saber dónde poner el listón

como consecuencia como juzgar a los demás.

Los números en el amor no cuentan, no suman.

La razón juega limitada por el corazón.

El amor no es extrañar algo del pasado.

El amor no responde las cinco preguntas.

El amor no es lo que hice por ti el sábado.

El amor no es todo lo anterior, ni lo contrario.

El amor no tiene espacio ni horario.

No tiene un poema que lo resuma,

ni recipientes que lo contengan.

El amor no es lo que piensas sentir

ni siente lo que piensas.
El amor no habla,

no hace planes ni se promete en un altar.

El amor no se alimenta del amor de los demás.

El amor, cuando lo ves, parece lo que tus dioptrías dejan ver.

La magnitud de la alas de tus ganas, de tu imaginación,

de tu pasado frustrado, de tu lugar y circunstancias de crianza,

de las personas que pudiste conocer, de la ventana que deja entrar el sol.

El amor es maltratado por nuestro pasado y resucitado por nuestro presente,

por el roce de tus manos, de tu piel, por la mirada de tus ojos esquivos.

El amor hace llorar mi alma al verte amanecer a mi lado.

Es como cuando una mamá ve a su hijo por primera vez.

El amor es fugaz y hermoso como cielo negro estrellado.

El amor no se puede atrapar, sería como atar un ángel alado.

El amor es total sin fisuras.
El amor no agradece, todo cree.

El amor vuela, viaja por nuestra sangre, acelera el corazón,

destruye todos los esquemas, pone de cabeza la razón.

El amor no se compra, no se gana, no se desea: se siente.

El amor da vida como la vida da amor.

El amor es la creatividad de dejar el alma en silencio.

El amor es un río que fluye por ella.

El amor es una foto tuya que no se me olvida.

Es un minuto que valió más por sentirte mía

que tiempo disperso vivido en otras partes.

El amor revienta todas las palabras,

no cabe en mi corazón ni en tu alma.

El amor es frágil como una ramita seca,  

tan grande como la profundidad del espacio.

El frío muere con un poco más de tela

si embargo el amor vive cuanto más frío hace,

cuando no sientes, cuando hasta la esperanza se pierde.

Imprevisto

Encontrarte con respuestas a destiempo,
en un momento distinto al que supusiste, 
te pone a lado de lo que realmente fuiste. 
Nada es fortuito, ni el color del viento.

No mirarte no me aleja de pensarte.
Soñarte no depende de extrañarte. 
Te quiero, no para casarme, 
y te odio, no para dejarte.

El roce de tus manos me devuelve sensibilidad,
el agobio de tus reclamos, dudas. 
Déjame y déjate que el corazón haga su trabajo, 
que nuestras bocas ya hablaron tanto... 

No obligues, no presiones a los sentimientos, 
son intangibles y propensos a marchitarse.
No los aceleres ni los frenes; 
dales tiempo y tal vez puedan aclararte.

Estima

Tejas rojas se me venían a la mente
mientras se hundía la estima que me tenía.
Te había tenido entre mis brazos, dormida,
pero me cansé de fallarte constantemente.

Me voy del sonido que producen tus silencios,
de la casa que habitas por las noches.
Me voy fuera de este mundo lleno de coches,
repleto de personas como corderos.

Huyendo de la misma esencia que soy
imagino una cordillera como guarida.
Desconectado de la realidad amarillista,
pariendo rosas y una flor.

Me tienes dando vueltas en el mismo sitio,
buscando un no sé qué en un lugar sin camino.
Por tanto daño, por tantos años,
me mudo a un sueño sin cama,
a un tiempo incierto en alguna montaña.

Cielo azul

No subas la cremallera de tu sonrisa.
Abre el riego a tus sueños marchitos.
Cierra el ministerio de justicia
que pudre al amor tintado de mito.
Corta las cadenas amarradas a tus alas.
Burla las noticias que no quisiste escuchar.
Grita las palabras que no se pueden ver.
Vuela hacia la cima de los desastres.

Cambia lo que puedas canjear
y olvida lo que no.
El camino está cargado de dudas.
Deja la puerta sin cerradura,
deja que pase lo que temes.
Borra el miedo que ata las manos.
Despide a quien dice ser tu hermano.
Devuelve la esperanza al interior,
a lo que no dice, a tus silencios.

El cielo no es azul,
son tus ganas de ser feliz.
Suelta tus deseos cual cometa.
Rompe la cuerda en la meta.
Llena tu vacío con algo,
ahí no entro ni salgo.
Acércate un poco más al fondo
y no a estas palabras.
Dale muerte a los intentos
y aliento a tus esfuerzos.

Quiebra el espejo que dice tus complejos,
pinta un cuadro abstracto en su lugar.
Llora por tu piel para que veas lejos.
Maquilla tus ojos de sol para deslumbrar.
Descuelga el botón del quiero y no puedo.
No bajes el listón del cielo.
No menosprecies lo pequeño,
los detalles que te formaron...
Vive más allá de los días
que mueren y tú no.

Palabras fáciles

Cómo decirte que me quiero acostar contigo
sin que parezca obsceno, sin hablarte;
una noche que no sea esta
en una cama inmaterial.

Sin parecer lo que tú tienes que descubrir.
Cómo ser lo que andabas buscando
sin cambiar ni tus gustos ni mi mala fama;
ni yo fácil ni tú difícil.

Si no lees como yo escribo,
¿de qué sirven estas palabras?
Si el sol no quiere calentar,
¿cómo acercarme a tu cama?

Cómo explicarte cuando no quiero.
No te debo nada.
Si quieres entrar, entra, imponte, infórmarte..
La gente solo ostenta la formula del éxito,
y yo muero...

La soledad de estas ideas reclama tus oídos,
mas no creo que te atrevas a romper con tus prejuicios.
Vivir en la ignorancia sugestiona el camino,
camino que rige lo que haces hoy.

Si obsceno es tocar tu seno,
he bebido más de la cuenta el veneno.
Pero siempre podrás disfrazarte de hielo
para que mis palabras acaricien el suelo.

Cómo se llama el sentimiento de no saber qué sientes,

de no saber a dónde te puede llevar;
o la negación de que te quiero más de la cuenta.
Cómo tener la certeza si te llevo en la cabeza;
o de pensar lo contrario si el aire me sabe a tus labios.

No te miento si te digo que haría del pecado una noche infinita,
que no me arrepentiría en la mañana siguiente,
que me ataría a tu piel eternamente...
pero, si no es tu indiferencia, son los terceros,
sino son los tópicos, son los problemas económicos.

Cómo acertar en el blanco si soy negro.
Cómo completarte si no puedo.
Cómo matar estas letras, o por lo menos disfrazarlas
de un futuro con menos problemas.
Pero tus ojos desatan en mí lo más sincero
y solo puedo decir lo que quiero.

Tu piel es agua al desierto, es cruel solo rozarla.
Tu aliento me embriaga hasta el punto de olvidar
lo que un día pudo unirnos sin tanta casualidad.
La verdad es que moriría en tu boca
sin pensarlo tanto, precisamente eso la provoca,
el pensar solo en ti y no en tus defectos,
en la indescriptible emoción de tenerte cerca
y no en tu terrible ausencia.

Si te quiero o no, si te amo o no, si somos la pareja ideal o no,
si soy lo que esperabas o no, si nos equivocamos o no,
si somos locos o no... el tiempo no lo sabrá decir.
Solo será la voz que dirá "te lo advertí".
Quizás los terceros tampoco,
ni modo solo depende de nosotros.

Y yo no tengo currículum ni pasado importante;
no tengo claro para qué sirven tantas palabras,
ni para qué los títulos ni las fotografías
si todo se lleva en el alma.
Solo espero que la voz nos de tiempo
para decir lo que las bocas no puedan.

Cansado

Cansado del pasado que acaba de morir,
de lo que hice casi bien, 
del trabajo que trajo estrés.
Cansado de vivir bajo mi piel. 

A pesar de lo cansado que vivo 
transpiro esperanza que mata pasado;
pasado por rutina que no esquiva mi retina.
Cansado de soportar esta espina.

Aburrido de resignar a mis ganas,
a vivir por latir adecuadamente. 
Cansado por no cumplir con mis principios,
de tirar al precipicio sueños dementes.

Cansado de palabras sin alma, 
de viajes sin destino, 
de tiempo tirado a la basura, 
de estar tan cerca de la locura,

de soñar contigo sin ti. 
Cansando, censurado, agotado
de que sea lunes y esperar que sea sábado,
de vivir por la inercia de un parto.

¿Cómo creer en las palabras que oímos?
El mundo está lleno de compromisos;
con el mal y bien que cada quien concibe,
¿dónde dirigir las atenciones de los oídos?

Si parece mejor vivir sin saber
porque no te obliga a tomar parte,
parte que nadie tiene como segura,
porque conocer genera más dudas.

Las dudas pueden más que las razones.
Tenemos la necesidad de creer;
nos agarramos a clavos ardientes,
queremos ser presidentes.

Dudas que generan tantos razonamientos...
necesidad que calman las palabras que más oímos
clavos que suplantan a la esperanza
de cambiar el mundo, nuestro mundo.

¿Cómo creernos si somos el reflejo de lo que dudamos,
de lo que el lugar que vivimos nos dejó ver,
de lo que las circunstancias nos dejaron ser?
¿Cómo no cuestionar todo, si sale de adentro?

La cordura está más cerca de la locura.
Según avanza nuestra vida
necesitamos algo que supere nuestras mentes,
que dudan hasta de nosotros mismos.

No sé si juzgo mi suerte,
el día de hoy que me permitió vivir,
a ti por no escucharme,
o al lápiz con el que escribí..

Desnuda

Abriste el cajón para buscar tu estilo,
no creiste que fuera tan difícil.
Cuando lo empezaste a sentir
el vestido que ibas a reconstruir se quedó sin hilo.

¿Qué te vas a poner para salir al mundo?
Donde necesitas más que una armadura...
La noche se presenta muy dura
para quedarte con esta amargura.

Pero queda una mañana más para encontrar tu destino.
El cielo es el tope de tu ambición,
las alas se cifran en un millón,
de eso se trata, medrar sin conclusión.

La seguridad no depende de un talón,
de una posición, delante de quien...
Nunca serías feliz sabiendo que
la mayoría no tendrá qué comer.

La felicidad no depende del amor
más que lo que tú puedas hacer con él.
Tus principios serán los finales
de tu suerte con cualquier desafío.

Sin embargo, siempre estará el desatino
para recordarnos el vacío
que queda con la incertidumbre
de si el ánimo de tu sonrisa es solo costumbre.

Aunque para mí te prefiero desnuda,
lejos de tanto brillo, sin duda.
Tú seguirás buscando en la luna
ropa para que te libre de dudas.

Ausencia

No poder elegir te pone a la altura de una televisión;
no soñar, al lado de los cobardes;
no amar, en el sitio equivocado;
no sentirte cerca, cerca de vivir por obligación.

La ausencia de ti es lo único que tengo de ti
y el intento de mejorar el presente olvidando el pasado,
pero esto último se trata de emprender un sueño caducado.
La necesidad de ti no se deja de sentir.

Los primeros pasos fueron por intuición;
la necesidad de tus brazos al otro lado, silencio;
los recuerdos, invisibles para archivo
quedan solo fotos condenadas a disolverse sin sitio.

Presente que recuerdas constantemente mi pena,
que no necesariamente mala ni buena,
porque vivirla es parte de mi venas
y olvidarla, otra deuda.

Cambiar es intentar lo que no se puede,
el resto es consecuencia de lo que quieres;
olvidarte es un constante,volver a empezar
lo de tu ausencia , ganas de llorar

Demasiado tarde

Entre palabras y miradas te descubrí;
con tu sonrisa tranquila me confundí.
Cómo mirar a un lado si tengo memoria.
Cómo descubrirte todo lo que por ti haría.

Si es demasiado tarde para los sueños,
¿qué hago pensando en tus pechos,
en los techos que podriamos alcanzar,
en los hechos que no vamos a realizar?

Pero tu provocación trastoca mi boca
que no desmiente la alegría que mi alma toca.
Mis ojos bailan al son que tus pasos andan
y mi voluntad se desgasta como roca bajo el agua.

Si es demasiado tarde para los anhelos,
¿por qué gasto tanto tiempo en ellos,
en viajes desde la playa hasta tus besos,
en palabras para curar heridas?

Si es demasiado tarde,
¿por qué tejen calor mis manos?
Si el frío es un punto de vista,
debería ser más realista.

Pero tu recuerdo en mi mente vive diferente,
hace fiesta y funerales constantemente.
A estas alturas de las dudas, ni claro ni veraz,
solo demasiado tarde para mirar atrás.

Soledad

Soledad que vive en la habitación de mis dudas
de falta de razones para espantarla,
de imaginarte tan lejos que verte resulta útopico,
e inviable tener una presunta charla.

Soledad, el espacio entre la materialidad y la fantasía.
El espacio que queda entre tus ojos,
el tiempo que sigue sin verlos.
Soledad en mi afán de traerte a mi orilla.

Sol y edad suficientes para encontrarte,
y un día menos de vida que tú para no extrañarte.
Soledad necesaria para esperarte,
silencio de mi sonrisa inapelable.

Soledad que lava los ojos
para reconocerte entre tanta gente.
Soledad que vivirá entre nosotros
para no olvidarme de quererte.

Promesas

Qué decir a tu corazón para que te convenza
que te quiero más de lo que tus espectativas rezan.
Tus ojos tímidos sonrojan a mi ego
que se postra para alimentar tu vuelo.

Rebuscar en lo recóndito de tus delitos
para que los vuelvas a cometer conmigo.
Cambiarte ni intentar lo puedo,
el gris también es cielo.

Regalarte lunas tampoco puedo,
ni soñarte cuando quiero.
Besarte hasta que arda hielo...
intentarlo nunca estará de más.

De qué valen las promesas si somos imperfectos.
Solo abrázame cuando tengas miedo.
Tal vez después de tantos intentos
querernos no sea una promesa que cumplir.