Desde lo alto de un mástil grito,
la intención es volar a tu oído.
Las palabras se quiebran entre los dientes,
mueren como penitentes.
¿Dónde están los que gastan las estadísticas?
¿Dónde se quedaron los hombres que cambiaron el mundo?
Nadie camina hacia el sonido que instiga
a navegar por sueños perdidos en saturno.
Los días son como dijo alguien, redes de triviales miserías
que pasan sin pena ni gloría.
Si aun reventado mis pulmones no me escuchas
no es que tenga magia las palabras ni salidas.
No te quedes en el banco de suplentes
esperando que yo te bese primero.
Las miserias también se acaban,
así que remonta el vuelo.
El acto mediante el cual el hombre se funda y revela a sí mismo es la poesía. La poesía nos hace tocar lo impalpable y escuchar la marea del silencio cubriendo un paisaje devastado por el insomnio. Cada poema es único. En cada obra late, con mayor o menor grado, toda la poesía. Cada lector busca algo en el poema. Y no es insólito que lo encuentre: Ya lo llevaba dentro. OP.
Nunca desistas de un sueño. Sólo trata de ver las señales que te lleven a él, sólo una cosa vuelve un sueño imposible: el miedo a fracasar.
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